viernes, 29 de abril de 2011

Festival de la Palta y tradicional Fiesta de las Cruces en Luricocha - Huanta

(Foto retocada, Fiesta de la Cruz, Martín Chambi - 1930)

En el distrito de Luricocha (provincia de Huanta, región Ayacucho), los días 1, 2 y 3 de mayo, se realizará el “XV Festival de la Palta y Tradicional Fiesta de las Cruces”, importante evento que permitirá promover al preciado fruto que en Luricocha tiene 23 variedades como fuerte, súper fuerte, nacional, linda, familiar, carioca, gigantón, mexicana, santillana, hass, etc.

Festival de la Palta.

Hugo Crespo Sánchez, conocido Récord Guinnes de la Pachamanca, como buen luricochano ha sido designado uno de los promotores principales del festival y viene dando a conocer las bondades del fruto precolombino que es muy preciado desde los antiguos peruanos.

Luricocha es considerado el primer productor de paltos a nivel nacional y parte importante de su producción es exportada a NorteAmérica y Europa. Ensaladas, cremas, aceites, postres, coctéles son platos y bebidas que tienen en la palta a un componente importante, sabroso y nutritivo”, señala Hugo Crespo.

Edgar Sánchez Cruz, alcalde de Luricocha, viene coordinando con su pueblo la preparación de la ensalada gigante de palta, que se realiza anualmente desde 1996 y en la que se emplea más de una tonelada y media de paltos. Ayer jueves 28, en el Restaurant La Retama Centro Comercial S. Felipe, Tienda 40 , segundo nivel, Jesús María.

El alcalde distrital de Luricocha Sánchez Cruz, indicó que el distrito frutícola produce alrededor de 135 toneladas métricas de paltas anuales y tienen como destino final Europa y Norteamérica.mencionó que en la actualidad se han sembrado más de 170 hectáreas de palta, con el objetivo de industrializarla en aceites, cremas, bebidas y otros productos. “Luricocha ya cuenta con una planta procesadora de aceite de palta, en los próximos meses se construirá el local para la planta de elaboración de licor”, expresó.

Los riesgos de producción en la zona se han incrementado porque el agua utilizada no es apta para su riego. Por eso, la Agencia Agraria de Huanta capacita a los productores del valle en el proceso del agua, tomando en cuenta las técnicas de riego a goteo y la conservación de los sembríos y cultivos.

En el mundo existen 182 especies de paltas consumibles, de las cuales Luricocha produce en grandes volúmenes la palta fuerte y linda.

El festival contará con la participación de artistas de la talla de Edwin Montoya "El Puquiano de Oro", la cantante Anita Santivañez, también se mostrará el folclore regional de aerófonos interpretados por “chunchos” y tendrá entre sus atractivos un rally automovilístico y deporte de canotaje.

*Nota si desea revisar más sobre la cadena productiva de la palta, visite aquí.

Fiesta de las Cruces.

El pueblo huantino, también se apresta a celebrar la tradicional Fiesta de las Cruces, al igual que el mundo católico celebra durante todo mayo la Fiesta de la Cruz. El 3 de mayo se conmemora el supuesto hallazgo del madero donde fue crucificado Jesús.

Con el traslado de unas 40 cruces de diversas comunidades y portando más de 300 crucifijos de varios tamaños, los pobladores del distrito de Luricocha, en la provincia de Huanta, y campesinos de las zonas altas de Ayacucho participarán en la tradicional Fiesta de las Cruces el próximo 3 de mayo

Durante la actividad religiosa sobresalen las cruces tutelares de Huatuscalla y Pachapunya, esta última mide unos cinco metros de largo y se encuentra ubicada en la zona más alta del distrito de Luricocha y es considerada la más representativa.

El día central, el 3 de mayo, la mayordomía y los fieles participan en una misa en el templo del distrito, donde se concentra la población de las zonas rurales y urbanas portando más de 300 crucifijos y trasladan entre 35 y 40 cruces que miden desde un metro y medio hasta cinco metros de largo.

“Estas cruces son adornadas con ramas de arrayán, romero, tallos de caña de azúcar, flores y coloridos paños”. También participan los chunchos (danzarines), quienes al término de la homilía danzan al ritmo de sonoras antaras o zampoñas”, mientras que las mujeres interpretan el tradicional jarahui (canto andino)..

Los visitantes que participen en la festividad religiosa también podrán degustar comidas típicas como el patachi de trigo, picante de trigo, mondongo, pucapicante, el puchero, cuy chactado, y acompañarlas con la chicha de molle o chicha de caña conocida como huarapo o la bebida de las siete semillas.

(Haga click sobre la imagen para ampliarla)

Aquí en Lima, también nuestros paisanos de Villa Huanta (Huantachico), están celebrando las Fiestas de las Cruces.

Los mayordomos de la Fiesta de las cruces de Villa Huanta, junto a la hermandad "Hijos de Cristo", en la capilla del Señor de Maynay.

Videos:
1) Documental: Un recorrido a Ayacucho, Huanta y Luricocha.


2) Documental: Festival de la Palta y Tradicional Fiesta de las Cruces en Luricocha.

domingo, 24 de abril de 2011

Semana Santa en Huanta - Ayacucho, expresión de fe y religiosidad

(imagen de Cristo Nazareno - Huanta)

La semana santa en Huanta y Ayacucho, culmina hoy domingo, con la resurrección del Señor Jesucristo, ha sido una semana, donde la población ha demostrado su profunda fe y religiosidad cristiana, de paz y reflexión, pero también lo ha sido para los visitantes turistas que en miles concurrieron para recorrer sus bellos parajes turísticos, degustar su rica gastronomía, adquirir su variada artesanía y divertirse también con su música tradicional.

(Vendedoras de palmas en Ayacucho)

(Encuentro: Cristo y la Virgen María)

La semana santa huantina, se inicia incluso días antes del domingo de Ramos, con diversas procesiones que recorren las principales calles de la ciudad, el miércoles santo encuentro del Señor con la Virgen María, el jueves santo se escenificó la pasión de Cristo, hacia el mirador donde se ubica el imponente Cristo Redentor en el Cerro el Calvario. El viernes santo se celebra el Sermón de las tres horas con las siete palabras, misa realizada en quechua, y en la noche la imponente procesión de la sagrada imagen del Señor del Santo Sepulcro y el domingo por la madrugada la procesión del Señor de la Resurrección y por la tarde disfrutaron de la divertida suelta de toros "toro puqllay" en la plaza principal de Huanta.
así revivimos el recorrido de la Semana Santa en Ayacucho deseándoles a todos unas felices Pascuas...

Video promocional de Semana Santa en Huanta:


Video promocional de Semana Santa en Ayacucho:

viernes, 22 de abril de 2011

Videos, por el día mundial de la tierra


Canto a la tierra en quechua (subtitulado por Servindi), interpretado por Consuelo Quinto Pantigoso (2008)

Hoy 22 de abril, se celebra el día mundial de la tierra, desde aquella primera manifestación que tuvo lugar en el año 1970, por el senador activista ambiental Gaylord Nelson, para la creación de una agencia ambiental. Dos años más tarde se celebró la primera conferencia internacional sobre el medio ambiente en Estocolmo, cuyo objetivo era sensibilizar a los lideres mundiales sobre la magnitud de los problemas mundiales.

Este día debe servir para reflexionar sobre los problemas como la falta de agua, el calentamiento global, la contaminación, así como la pérdida de la biodiversidad del planeta entre otras preocupaciones.

Les presentamos algunas iniciativas de artistas e instituciones a través de la música, seleccionadas, especialmente para tomar conciencia con nuestro hogar el planeta tierra, como aquel emblemático video -apocalíptico- que nos regalara Michael Jackson "Earth Song".

Video: Planeta tierra, una pequeña vista de lo maravilloso que es nuestro mundo.


Video: Tu planeta, con excelentes imágenes


Video: La tierra vista desde el espacio, con imágenes inéditas y musicalizado

miércoles, 20 de abril de 2011

Casicha. Un cuento de la narrativa huantina (Cholerías)


Huanta ha tenido en Don Porfirio Meneses Lazón (1915 - 2009), a un ilustre huantino de la literatura peruana, considerado un neoindigenista de la generación del 50. Meneses ha sabido ilustrar a Huanta en su narrativa, precisamente en el libro "Cholerías" nos muestra la vida en los caseríos, sus paisajes de la campiña huantina, redactada con la maestría de la pluma y un lenguaje poético, reivindicando a los indios y mestizos de nuestra serranía. Para muestra les entregamos el cuento "Casicha" (escrita en 1946) de su libro "Cholerías".

Casicha

La campiña de Huanta ya muestra por marzo sus choclos maduros. Los maizales, por donde vaya la vista, se encuentran meciendo los infinitos penachos al vaivén de los vientos. Cuando han pasado los chaparrones propios de febrero, cada tallo presenta de dos a cuatro choclos de rubia cabellera, que sólo esperan el acomodarse en la gran olla de barro para hacer la felicidad de los cholos huantinos.

Este es tiempo de cuidado para los dueños de chacras. Primero, porque los cercos y tapiales son apenas simbólicos, y los caminillos van hilvanando todas las propiedades; y segundo, porque hay huantinos tan antojadizos…

El choclito de chacra ajena es siempre agradable para los que tienen maizal inmaduro, o para los que no tienen chacra. Y, desde luego, para todos los mataperros, sean mozos o mozas. Por eso ahora el viejo Eulalio Janampa, del pago de Pucarajay, está preocupado. Es el buen padre de familia que cavila por el pan del hogar.
Tiene mujer y tres hijos que alimentar y, cosas del tiempo cada vez más malo, ya no siempre da bien la albañilería en Huanta. Porque tayta Eulalio es albañil y encuentra que todo va peor ahora tal vez si, como él piensa, porque hay tanto forastero hambriento que todo lo está echando a perder. Hombre añoso, experimentado, tiene ideas ásperas sobre las cosas.

Compró el año pasado una chacrita en Huallhuayoj, y sembró en ella lo que hoy es un maizal hermoso. Han graneado admirablemente las mazorcas y pocos vecinos pueden ufanarse tanto como él ahora, ante las perspectivas de una buena cosecha. Sólo que aquellos mismos vecinos, han tomado buena nota de la hermosura del maizal del viejo Eulalio, para proceder en cuanto el sol se anide.

Eulalio conoce estas intenciones, y piensa que dará codillo a esos lagartos cuidando su chacra. Hubiera querido sin duda realizar ya la siega y parar los haces para el oreo, pero es que no puede darse tiempo por estas semanas pues está cumpliendo con una contrata urgente, a la que debe todas sus horas. De otro lado, no todas las plantas están igualmente maduras, en punto de corte, y hay que esperar un tanto hasta que los granos doren.

Ha construido ya la chuglla —chocita minúscula elevada sobre cuatro puntales—, y desde allí cuidarán su mujer o sus hijos. Ha establecido un turno, claro está. Si no va él, va Casimiro, el hijo mayor, y a veces doña Nativa con los dos más pequeños. El bueno del viejo es hombre de pocas pulgas tratándose del sustento de sus hijos: cuando vigila se acompaña de un nudoso palo y hay que temerlo. Pero menos pulgas aguanta la mama Nativa. Porque echa al diario un geniazo…

Cuando va ella a cuidar, llevando a Ipicha y Ruficha, la gente de las chacras cercanas no duerme. En la profundidad de la noche se percibe el ruido de piedras que caen desgajando las hojas del maizal y la voz de la mujer que de rato en rato dice:

—¡Qué hacendo ay, ladrunazo! T’estoy viendo ¿acaso qui nó? Si no te vas te rompo tu crisma. ¡Supaypa-huahua!

Generalmente no hay nadie, y es el movimiento de las hojas con el empuje del viento lo que provoca en doña Nativa éstas y otras expresiones de variado calibre. Porque nadie se atreve a cosechar pedradas en lugar de maíz tierno, desde que, según las trazas, mama Nativa no es mujer muy sentimental.

Pero ocurre a veces, en las noches lóbregas, que a señora tan animosa quiere invadirla el temor. ¿Quién no conoce el miedo? Entonces ella azuza a sus chicos, éstos al perrito y entre todos componen una orquesta infernal que mantiene despiertos a los vecinos en media legua a la redonda. Hasta que se les pasa el miedo o se cansan, y se duermen tan profundamente que ni un castillo de cohetes podría despertarlos.

Casimiro es mocito que merece atención especial. Cuando sus padres están de mal humor, lo llaman Casemiro, a secas; y si están cariñosos le dicen Casicha. Es un muchacho que ya tiene sus inquietudes. Posee su poquito de primaria, y aunque no ata bien dos palabras en castellano, en quechua es una tarabilla. Sabe que dos y dos son cuatro, y sabe también que en el cinema del pueblo se ven cosas bonitas, porque ya ha ido varias veces a repantigarse en la pulguienta cazuelita.

De aquí que experimenta cierta desazón al tener que marchar la mayoría de las noches para el cuidado de la chacra. Por él, bien se las pasaría sin choclos. Aunque es verdad que no piensa lo mismo cuando a la hora del yantar los ve humeando en su mate. Pero con gusto o sin él, va siempre por los senderos, a veces enlodados o malolientes, a cumplir con su tarea mientras de sus labios se deshila un huaino en agradable silbo.

En una noche de puras sombras, instalado como en abandono dentro de la chuglla dejaba vagar sus pensamientos, sus ideas, sobre todos los motivos de su preferencia. Pensaba en cuánto de agradable iba conociendo su vida. Y meciéndose en sus recuerdos, no llevaba cuenta del susurrante silencio de los innúmeros follajes del contorno; ni prestaba atención al chi–chi–chi–chi de los huajankichus, ni al vanidoso croar de los sapitos. No trasponía el umbral de sus oídos el tu-cuh lejano de algún búho agestado, ni el canto horario de los pichiusas. Mientras tanto, vivían en el ambiente la suavidad del aire tibio, el estar tranquilo de los árboles linderos y la oscuridad adherida a todas las cosas.

Pero algo hubo por fin que desvió el pensar de Casicha. Era un ruido sospechoso allá por un extremo de la chacra. Aguzó el oído y percibió un quebrar de cañas de choclo, un rozarse áspero y continuado de hojas. No había dudas: alguien robaba. De primer momento se incorporó y quiso arrojar piedras en dirección del ruido. Pero luego sintió curiosidad por localizar y conocer a quien lo producía. Salió cuidadosamente de la chuglla, y procurando la mayor levedad en sus pasos fue encaminándose hasta el extremo donde se hallaba el intruso. Se llegó primero al cerco y bordeando la chacra iba sorteando el manazo silente de algunas pencas agresivas, y el quebrarse sin penas de las ramitas bajo sus pies. Poco a poco se fue acercando al ruido extraño hasta poder precisar la silueta del causante: era una mujer que se movía por entre las plantas, quebrando los choclos de su tallo con la mayor destreza. Casicha pudo verla llenar rápidamente su falda e ir a vaciarla sobre una manta extendida por allí cerca.

Oculto al pie del cerco, el mozo atisbó las cercanías a que podía su vista alcanzar, y convencido de que no había nadie más, se trazó rápidamente un plan. Con el sigilo de siempre acortó aún más la distancia entre él y la desconocida, y de pronto dio cuatro saltos hasta ella y la cogió abrazándola por la espalda.

—¡Qué tala, no? Conque tú habías sido… ¿Qué tú haces aquí? ¡Ladrona!
—¡No, niñucha, taytito! ¡Soltamé! —exclamó asustada, aunque sin grito, la mujer—. Te lo pagaré. Cuéntalo tus choclos…
—Oiga, así namás quieres acabar. Aura vas a ver tú. Qué tala Margarita, su hija de siño Juélis. Robándome, ¿no? Tenes que yer conmigo hasta donde la guardia. ¡Vamos!
Quiso forcejear la muchacha pero Casimiro la tenía bien cogida y cerró aún más los brazos.
—¿Pero así tan miselabre vas a ser tú? —dijo ella. ¿Por estito, por estos cuatro choclos me vas a llevar al puesto? ¡Tatao! ¡Soltamé!
—Pechuga, ah? Todavía mi robas y te voy soltar tranquelito. Vamos…
—¡Pero soltamé, te pagaré pues! Cuánto plata ya va a ser…

Y procuraba deshacerse de las tenazas del mozo. Antes que gritar hablaba atenuadamente, pero con nerviosidad, agitación. Le aterraba pensar que los vecinos pudieran enterarse del hecho. Por su parte, Casicha estaba dispuesto a hacer respetar su propiedad. Sobre todo porque había reconocido en la muchacha a la jugosa y deseable hija del siñó Félix Champa. Por ello, tácticamente, siguió en su aparatoso afán de amedrentarla con la idea del puesto policial. Hablando de ella decíale:

—Toma. Por qué tú mi robas. Vamos.
—Pero aistá pues, lo dejo todito —se resistía ella, ya sin valor. Mañana tempranito te daré tu plata de lo que lo hey partido de su huero. ¿Acaso no te voy a pagar? Déjame, pues.
—No me da mi gana —repuso el cholo, pero en seguida agregó: Bueno, te voy perdonar, pero…

Había considerado la alarma como suficiente para sus fines. Al pero condicional sucedió un nuevo giro en la orientación de sus fuerzas. Por algo era que no había dejado por un instante de aprisionar a la hermosa ladronzuela. Fue entonces que ésta convirtió su miedo en indignación: —¡Ah! ¿Y tu lisura? Conque, ¿no? ¡No quiero! Voy llamar a mi papá, verás. ¡Pa…!

—Zonza pues no seas, niñacha. Callaté…

Ella tenía un gesto airado que se imponía sobre la penumbra, y había sacado de quién sabe dónde unas fuerzas endiabladas. Hacían tensión todos sus músculos. Pero el mozo tenía energías persuasivas y muy pronto la convenció de que había una culpa que purgar. La Margarita, pues, le pagó a Casicha todos los choclos cogidos y por coger, ante un jurado de sombras.

Cobrada la deuda, satisfecho el mozo, empezó solícitamente a quebrar más choclos para la manta de la muchacha. Mientras tanto, parada a un lado, podía verse la silueta de ella destacando un aire de altivez y de enojo notablemente encendido. El cholillo advertía:

—Otro vez que no te vay’encontrar mi papá porque no te lo escapas del puesto. Ni mi mamá tampoco porque lo rompería tu cabeza. A la vista cuando yo venga voy estar silbándome, entonces…
—Si pues, —cortó socarrona la chola— por tus tan lindos choclos voy estar viniendo a faltarme. ¡Plaga!
—No te molestas niña. Pasau mañana también voy cuidar aquí…
—¡Jajay! ¡Eso cuando…! —rió ella, y cogiendo su atado echó a correr perdiéndose pronto en la oscuridad.

Casicha es ahora el más empeñado en cuidar la chacra. Va hasta cuando no le toca, dando así gran alivio a sus padres.

—Pobre mi huarma, — dice el tayta Eulalio —cómo se preocupa por nuestras cosas.

En tanto, el maizal presenta en las noches, como siempre, su perfume de huacatay, el chillido de sus grillos, el canto bronco de sus búhos. Y, como siempre también, bajo cielorrasos de piedra —como en diminutos proscenios— dan su canto los sapitos. De día, la luz lo viste todo con los verdes. El maizal está hermoso. Sólo el viejo Eulalio no se explica cómo, habiendo buena vigilancia, disminuyen tanto los choclos.

martes, 19 de abril de 2011

Huantinos celebraron las "Bodas de Plata" del Club Social Huanta

La Sra. Rosa Torres vda. de Hiraoka, junto a sus hijos Raúl -su esposa- y Carmen, el presidente Wilder López y directivos del Club Social Huanta.

Los socios y familias huantinas residentes en Lima, celebraron el día domingo 17 de abril las "Bodas de Plata" en sus 25 años de fundación del Club Social Huanta (20 de abril - 1986 - 2011), en su sede institucional de Magdalena del Mar.

La celebración se inició al mediodía a cargo del maestro de ceremonias el Dr. Alex Girón, quien en su alocución hizo una semblanza de los benefactores Don Carlos Ch. Hiraoka y Doña Rosa Torres vda. de Hiraoka, quienes además estuvieron acompañados de su 2 hijos (Raúl y Carmen Hiraoka) en la mesa de honor y junto a ellos el presidente del Club Sr. Wilder López S, y algunos past presidentes y la reina del club. Se destacó la trayectoria de vida de la familia Hiraoka como un gran filántropo e integrador de los huantinos recordando la donación del local institucional, que dió inició a la fusión de 2 instituciones que por entonces funcionaban paralelamente: el Club Huanta, y el Centro Social Huanta.

La mesa central, en homenaje a las Bodas de Plata del Club Social Huanta, engalanado por el ramillete de flores de las diversas instituciones huantinas.

Acto seguido como un homenaje póstumo, se procedió a develar el busto de Don Carlos Chiyoteru Hiraoka, en el Hall del Club, por la Sra. Rosa Torres Vda. de Hiraoka y sus hijos Carmen y Raúl (que estuvo acompañada de su sra. esposa), ante el aplauso prolongado de la concurrencia. Se celebró brevemente una misa de gracias Te Deum.

La develación del Busto de Don Carlos Ch. Hiraoka, a cargo de su Vda. Doña Rosita, y sus Hijos Raúl y Carmen.

Las palabras del Sr. Raúl Hiraoka, fueron de agradecimiento a la memoria de su padre, quien deseó siempre la unificación de todos los huantinos, además de recordar que siempre mencionaba que "Yo soy japonés de nacimiento, pero huantino de corazón..." la que ha quedado perennizado en una placa recordatoria en el club. El legado a las generaciones, es a través de esta sede institucional, para confraternizar y unificar a todos los huantinos "El Club Social Huanta es para todos los huantinos sin excepción" , espacio donde podamos rememorar, celebrar y rememorar las nuestras costumbres y tradiciones, revalorizando la identidad de nuestra querida Huanta la "Bella Esmeralda de los Andes".

El Sr. Raúl Hiraoka, en breves palabras de agradecimiento a su progenitor Don Carlos Ch. Hiraoka y el saludo en los 25 años del Club Social Huanta.

Asimismo el presidente del Club, Sr. Wilder López, agradeció a la Sra. Rosa Torres vda. de Hiraoka, por el gesto junto a Don Carlos Hiraoka que tuvieron hace 25 años de donar la sede institucional del Club para hermanar a los huantinos. Este momento de la ceremonia sirvió para homenajear a la Sra. Rosita Torres vda. de Hiraoka, con la más alta distinción de medalla de honor otorgada por el Club, y declararla presidente honoraria y vitalicia del Club Social Huanta.

Homenaje y reconocimiento oficial como Presidenta Honoraria y Vitalicia del Club Social Huanta a la señora Rosa Torres vda. de Hiraoka.

Un gran ramillete de flores engalanaron la mesa central, las instituciones se hicieron presentes: entre ellas, la Asociación Vigiliana, la Asociación Armonía Huanta, Amahrel, Think, Importaciones Hiraoka, etc. y los saludos que alcanzaron en sus Bodas de Plata. Se presentaron también las estampas folcklóricas, con una marinera ayacuchana y un tradicional huaylas.

La presentación de la Revista Huanta, editado por el Club Social Huanta, estuvo a cargo del Secretario de Cultura el Sr. Jaime Mayorga, donde se resume en diversos artículos nuestro acervo cultural y tradicional, con imágenes muy bellas de nuestro valle huantino. Los socios huantinos invitados degustaron de la gastronomía huantina, bajo el acompañamiento de la música tradicional ayacuchana y huantina, con huaynos y carnavales que invitaron a participar a todos los asistentes. !Salud! a todos los socios huantinos y que sean muchos años más de fructífera labor institucional...

La Sra. Rosa Torres vda. de Hiraoka, rodeada de la actual Junta Directiva del Club Social Huanta.

Miscelánea gráfica:






25º Aniversario del Club Social Huanta y Homenaje a la Familia Hiraoka-Torres

martes, 12 de abril de 2011

Razzu Willka y Waman Tika (mitos y leyendas de Huanta)

Nuevamente les ofrecemos otra leyenda, sobre la imponente laguna de Huanta el Apu Razuhuillca que se encuentra en la cabecera de la ciudad huantina. Este leyenda data de la época inca, recopilada por el Profesor Saturnino Ayala Aponte (versión libre).

Razzu Willka y Waman Tika

El Templo Inka Raqay donde las más bellas cuzqueñas adoraban al dios Sol se ubicaba en Huanta y entre todas las ñustas destacaba por su gracia Waman Tika que ese día se hallaba junto a Ccoyllur, la mamakuna que cuidaba a las ñustas, preparando chicha para la ceremonia sagrada, pero al faltar unos ingredientes, sale la joven del templo y se dirige hasta las orillas del río Cachi para recoger llantén y pinco pinco.

¡Qué día más caluroso nos has regalado hoy padre Sol! Tu servidora Waman Tika, flor de águila, te lo agradece, dice alzando sus manos al cielo.

Buscando llantén llega hasta un remanso del río, donde ve reflejada su imagen en las tranquilas aguas que semejaba un gran espejo. Se agacha y aupando entre sus manos toma un sorbo del cristalino líquido y extasiada dice: ¡Hum, qué fresquita está tu aguita, gracias río Cachi! Y moja su rostro sofocado por el brillo de su padre, el sol.

Al sentir la sensación de frescura se siente tentada de bañarse, no recuerda las palabras y consejos de la mamakuna Ccoyllur, ella había dicho a todas las ñustas: “Ustedes, son las hijas del sol, jamás deben mostrarse ante ningún mortal, menos mostrar su cuerpo, el día que una de ustedes lo haga, será expulsada de Inka Rajay. ¡Cuidadito entonces!”.

Waman Tika no se resiste más mira a todos lados y creyéndose sola dice: ¡Aprovecharé para darme un baño!, cantando una hermosa melodía, se quita su ropa, quedando en camisón y se mete en las aguas límpidas del río Cachi.

Pobre inocente, no podía imaginarse de las consecuencias de tal osadía, porque no tan lejos de allí, oculto tras un árbol se hallaba el poderoso jefe huantino Razu Willka, miraba embelesado la belleza de la ñusta.

Razu Willka era respetuoso con los incas pero siempre había mantenido una actitud inconforme y desafiante frente a los incas y hasta los odiaba, cuando recordaba que los mejores guerreros habían muerto en Ayahuarcuna y Quinua cuando fueron conquistados por los incas a sangre y fuego, les habían arrebatado las mejores tierras del valle y los obligaban a vivir en las punas y habían reemplazado al su dios Wamán por el dios Sol en Vilcas. Pero los incas repetaron a los jefes huantinos y le dieron libertad de tránsito.

Razu Willca aprovechando que podía ir donde quisiera estaba desde hace tiempo rondando el Templo y un día había visto a Waman Tika, y desde ese día quedó prendado de ella; él no considero que todo varón estaba prohibido mirar a las ñustas sagradas del Sol bajo pena de muerte. Esa mañana la había visto salir y la siguió.

Bien pues, La inocente Waman Tika distraída se bañaba en el remanso y de pronto sintió una mirada perturbadora, levanta la mirada y descubre que un hombre la miraba, asustada se cubre con sus manos diciendo: ¡Oh, no… alguien me ha descubierto!...

Desesperada mira al cielo y clama: ¡Padre Sol, cúbreme de las miradas impropias de los hombres! Corriendo sale de las aguas hasta donde esta sus ropas.

El dios Sol le envía con la diosa Pachamama un velo blanco de nube que la cubre toda, pero solo por un instante, porque Razu Willka, saliendo de su escondite, sopla con fuerza para que se le caiga el velo de nube que cubría el cuerpo de la ñusta.

Admirando la belleza de la joven cuzqueña, el atrevido apu huantino, entre emocionado y soberbio le dice: ¡Adorable hija del Sol! ¡Waman Tika esplendorosa!.. Permite que este humilde enamorado contemple tu belleza sin par.

Sin hacer caso de las palabras del valeroso huantino, Waman Tika trata de coger su ropa para cubrirse, buscando ayuda de la diosa Pachamama, dice: ¡Pachamama, diosa bienhechora! ¡Ayuda a salvar mi pureza!

La diosa, para proteger a la bella ñusta, coloca una frondosa rama delante del impetuoso Razu Willca. Así, le da tiempo a Waman Tika, que presurosa se viste mientras lloraba desesperada. La diosa Pachamama, molesta, le dice al atrevido Razu Willka: ¡Márchate Apu Razu Willka! ¡Has labrado la desgracia de Waman Tika con tus indiscretas miradas!. Razu Willka indolente le da la espalda y se va.

Coyllur, desde lo alto del templo había visto toda la escena y estaba muy indignada por el descuido de Waman Tika que había provocado esa enojosa situación. Por eso, viéndola venir baja y sale a las puertas del templo, donde detiene a la joven, diciéndole: ¡No tienes nada que contarme Waman Tika! Lo he visto todo. Me horroriza lo que has hecho.

Molesta le dice: ¿De qué te sirvieron mis consejos? Tu necedad permitió que un hombre, el Curaca Razu Willka, te haya mirado casi sin ropas. Por ello ¡ya no puedes ingresar al templo de nuestro padre sol.

Mirándola con desprecio arguye: ¡Has sido profanada! ¡Aquí, ya no hay lugar para ti! Ahora ve y cuida de tu destino. Diciendo esto, Coyllur, cierra las puertas del templo en la cara de Waman Tika que cae de rodillas llorando su desgracia, las lágrimas que caían a raudales se iban convirtiendo en rocas cristalizadas y el Valle volvìase un roquedal.

Dándose cuenta del mal que causaba, Waman Tika invoca a Pachamama diciendo: Pachamama, madre bendita, que mis lágrimas no dañen este lugar sino que sirvan para regarlo, y que este valle siempre conserve su verdor. Rauraq, amigo de Razu Willka que había observado toda la escena, presuroso va en busca del apu y le cuenta lo sucedido.

Razu Willca se dirige hasta donde está Waman Tika decidido a pedirle que sea su esposa, al llegar allí, ve a la ñusta arrodillada, se acerca a ella e intenta cogerla del brazo para levantarla; entonces un trueno retumba en el lugar y se ve la luz de un relámpago.

La diosa Pachamama había impedido que Razu Willka toque a Waman Tika, detiene la acción del huantino cubriéndolo con una manta y le dice:

¡Alto Razu Willka! ¡No puedes tocar a una Virgen del Sol! Es voluntad del dios Sol que te conviertas en majestuoso nevado, protector de estas comarcas y como no obraste por maldad sino por amor, el padre Sol te concede el consuelo de que tus lágrimas se unan a la de tu amada Waman Tika en este bello vergel, destinado a ser la “Esmeralda de los Andes”


Y así Razu Willka y Waman Tika fueron castigados por no cumplir las leyes sagradas del dios Sol, pero debido al amor que el huantino sentía por la bella cuzqueña, juntó sus lágrimas con las de la joven para siempre en el bello valle de Huanta..

¿Qué lecciones sacamos de esta leyenda?

Primero: Cuando tengas un deber que cumplir, no te distraigas en el camino. Tal como hizo Waman Tika cuando decide bañarse dejando la labor de recoger las plantas de llantén y pinco pinco.

Segundo: Piensa en las consecuencias antes de tomar una decisión, sino te acarreará desgracias. Tal como le pasó a Waman Tika cuando no pensó en las consecuencias de tomar un baño fuera del templo pues era prohibido por las leyes sagradas de los incas.

Tercero: Aunque el corazón se te desgarre, cumple con tus obligaciones. Es lo que hizo la mamacuna Ccoyllur sin tener más contemplaciones con Waman Tika.

Cuarto: Si amas no debes ser imprudente, puedes dañar al ser que amas. Tal como pasó con Razu Willka que por imprudente perdió a la casta Waman Tika que estaba prohibida para los ojos de los hombres.

Club Social Huanta: 25 años de fructífera labor

" BODAS DE PLATA " ( 1986-2011 )

El CLUB SOCIAL HUANTA está de aniversario. Hace 25 años, un domingo, 20 de abril de 1986, a las 11:00 horas, un grupo de entusiastas y emprendedores huantinos -tanto de nacimiento como de corazón-, se reunieron en la entonces Asociación Departamental de Ayacucho (ADA), ubicada en la cuadra 19 de la Av. Brasil, con el propósito de fundar una institución a la que denominaron " CLUB SOCIAL HUANTA ", como resultado de la fusión de 2 instituciones emblemáticas de los huantinos residentes en la capital: el CENTRO SOCIAL HUANTA y el CLUB HUANTA.

Los artífices de tan loable hazaña fueron don CARLOS CH. HIRAOKA y su señora esposa, doña ROSA TORRES DE HIRAOKA, quienes para hacer efectiva dicha fusión, generosamente donaron una amplia casona ubicada en el Jr. Junin 312, Magdalena del Mar, a fin de que funcione en ella la sede de la institución que acababa de nacer. " Nuestra gratitud se manifiesta por 25a vez, para expresar a los propulsores y artífices de la fundación del Club Social Huanta, nuestro justo y merecido reconocimiento ".


Nuestro saludo de parte de toda la colectividad huantina, al Club Social Huanta, en estos 25 años de fructífera labor.

Para este domingo 17 de abril, a partir de las 11 am, la Junta Directiva del Club Social Huanta, se complace en invitar a la comunidad huantina, a la ceremonia central con motivo de celebrarse los 25 años de fundación del club. Habrá un programa especial, que se iniciará con una misa TeDeum, posteriormente el homenaje al patriarca Carlos Ch. Hiraoka, con el develamiento de un busto en la entrada del club, agradecimiento especial a las personas que hicieron posible la fundación del club y finalmente un almuerzo de confraternidad, en su local , sito en el jr. Junín # 312, Magdalena del Mar.

El toro encantado de Razuhuillca (Leyenda de Huanta)

Huanta, tiene una rica tradición, y es una costumbre entre sus pobladores, la transmisión de generación en generación de sus mitos, leyendas y cuentos, que describe en el tiempo y espacio, sus vivencias, emociones y creencias. Queremos también a través de este espacio (Blog de Armonía), alcanzarles estos cuentos, -que con el tiempo muchas veces estamos olvidando- apoyando a preservar muchas de nuestras tradiciones ancestrales.

EL TORO ENCANTADO:

Razuhuillca es una laguna situada a unos quince kilómetros de la población de Huanta. Está en medio de otras tres lagunas que la rodean, pero Rasuhuillca es la mas grande, por lo tanto la principal. La laguna está en la cima de un cerro que domina la entrada del pueblo, por eso se ha construido en ella una represa que suministra de agua para el regadío, y para el consumo del pueblo. La tradición huantina dice que dentro de ésta laguna se encuentra un toro negro hermoso y corpulento, sujeto con una cadena de oro cuyo extremo guarda una anciana de cabellos canos.

Hace muchos años, el toro logro vencer a la anciana y salió a la superficie; e inmediatamente las aguas de la laguna se embravecieron y rompieron los diques con grandes oleajes, inundaron el pueblo, arrasaron toda la población produciendo grandes estragos; entonces, los indios de la altura, al darse cuenta de esto, procedieron rápidamente a echar lazo al toro y lo hundieron nuevamente. Desde aquel día la gente teme que otra vez el toro pueda escaparse y la laguna inunde la floreciente ciudad de Huanta.
(Cuento, versión libre.)

sábado, 2 de abril de 2011

Actividades en el mes de aniversario "Bodas de Plata" del Club Social Huanta (1986-2011)


En este mes de aniversario el Club Social Huanta Huanta, cumple sus 25 años de vida institucional "Bodas de Plata", tiene el agrado de invitar a todos los Socios, Huantinos y amigos en general, a las diferentes actividades a realizarse. Por tal motivo La Junta Directiva en pleno le espera para compartir, de las diferentes actividades programadas, en la alegrìa y satisfacciòn de cumplir èste aniversario tan especial como es sus Bodas de Plata.

Las actividades del mes de aniversario se inician el domingo 03 de abril desde las 11:00 am. con con la conferencia de prensa, y la presentación de la variada y rica gastronomía huantina ante los medios de comunicación.

AGENDA:

Domingo 3 de Abril.
11:00 hrs. Conferencia de Prensa
12:00 hrs. Presentación y degustación de la gastronomía de Huanta.
13:00 hrs. Proyección del video biográfico de don Carlos Ch. Hiraoka.
14:00 hrs. Exposición y venta de souvenirs alusivos a las Bodas de Plata del Club. (todo el mes)
14:00 hrs. Exposición fotográfica y de cuadros de pintores huantinos. (todo el mes).

Domingo 17 de Abril : Ceremonia Principal con programa especial.
12:00 hrs. Homenaje y reconocimiento oficial como Presidenta Honoraria y Vitalicia del Club Social Huanta a la Sra. Rosa Torres Vda. de Hiraoka.
12:30 hrs. Develamiento del busto en homenaje póstumo a don Carlos Ch. Hiraoka.
13:00 hrs. Almuerzo de camaradería
Sábado 30 de Abril.
21:00 hrs. Gran fiesta de confraternidad.