domingo, 4 de abril de 2010

Un recorrido por la Semana Santa en Ayacucho

Un artículo aparecido en el suplemento El Dominical del diario El Comercio, deja constancia de la Semana Santa más solemne y tradicional e incomparable es la que se realiza en Ayacucho.
Recorramos juntos esta fe mestiza, de la Vida y Pasión y Muerte de Cristo, pero también llena de esperanza que se realiza en nuestra región.

Domingo de Ramos
Jesús montado en un borrico y acompañado por sus apóstoles sale triunfal del templo del Monasterio de Santa Teresa de Jesús y se dirige por la avenida 28 de Julio a la Plaza de Armas y luego a la Catedral. Durante el recorrido, los acompañantes agitan las palmas bendecidas. Este mismo día se inicia la entrada de chamiza, es decir de las retamas traídas por los arrieros de Qarminqa (Carmen Alto), Conchopata y otros barrios, que serán quemadas en la procesión de Pascua de Resurrección.

Lunes y Martes Santo
Del Templo de la Buena Muerte sale la procesión del Señor de la Oración del Huerto. El martes se celebra la santa misa en el Templo de la Amargura, a cargo de los miembros del Poder Judicial. Ese día recuas de mulas, asnos y llamas vistosamente adornadas llevan la carga de retama (la chamiza) que es depositada en el patio de la municipalidad hasta la madrugada del Domingo de Pascua o Resurrección, en que será quemada. Por la noche, sale en procesión el Señor de la Sentencia. La imagen lleva las manos atadas y muestra signos de haber sido torturada.

El Miércoles Santo
Es uno de los días de mayor emoción. En la noche, la Plaza de Armas se convierte en el principal escenario. Las procesiones de Jesús Nazareno y de la Virgen Dolorosa salen del Templo de Santa Clara para revivir el encuentro de la madre con su hijo, camino al calvario. Participan también San Juan y la Verónica.

A las nueve de la noche, ingresa el Nazareno a la Plaza de Armas. La Verónica sale al encuentro de Cristo en una pequeña anda cargada por jóvenes. Ambas andas se inclinan para que la buena mujer limpie la sangre y el sudor del Señor, queda la huella de su rostro impregnada en el paño. Luego la Verónica se dirige a San Juan para informarle que estuvo con Jesús y también le comunica la triste nueva a la Virgen. Enseguida, los tres van en busca del Nazareno, ansiosos de encontrarlo. Entonces surge en la plaza el anda de la Virgen, precedida por una doble fila de mujeres, todas indígenas, portando cirios y cubiertas con largas bayetas de colores. La Verónica llega hasta la Virgen, le hace reverencias y da las noticias. Al fin, la Virgen encuentra a su hijo. Es el momento más impresionante y dramático. Las andas se inclinan. Parece que las imágenes conversan entre sí por un buen rato. El encuentro termina cuando Jesús, la Virgen y los santos regresan a sus iglesias.

El Jueves Santo
Este es un día de visitas a las iglesias o monumentos eucarísticos, además de misas. Se recuerda también la humildad de Cristo, con el acto que realiza el obispo, lavando los pies a un grupo de ancianos del asilo.

El Viernes Santo
Con gran expectativa se espera este día. Y en la noche por las calles se desplaza la procesión del Santo Sepulcro y de la Virgen Dolorosa. Es un día de duelo por la muerte de Jesús y en el que se pronuncia el tradicional Sermón de las Siete Palabras, siendo única la representación de las 3 horas de Cristo en el calvario que se adorna con árboles dentro de la iglesia Matriz de Huanta.

El Sábado de Gloria
Es un día de alegría por la resurrección de Jesús. Llegan los morochucos de Pampa Cangallo montados en sus pequeños y lanudos caballos, tocando sus bandurrias. En este día se realiza la famosa Feria de Acuchimay. A partir de las 7 de la noche, en la Basílica de la Catedral, se ofrecen actos litúrgicos como la bendición del fuego, del cirio pascual y del agua bautismal.

Domingo de Pascua
Desde la noche anterior se realizan verbenas, se queman fuegos artificiales al compás de bandas de músicos que acompañan a los miles de fieles que esperan ansiosamente la aparición del Señor de la Resurrección. En la mañana del domingo, el Cristo resucitado hace su aparición y recorre la Plaza de Armas. Va acompañado por más de 300 personas que cargan la enorme anda adornada con cientos de cirios encendidos. En la esquina previa al ingreso del Santísimo, se entrega el estandarte a la nueva mayordomía. Después de ingresar el anda a la Catedral se lleva a cabo la gran carrera de caballos de los morochucos en el estadio Leoncio Prado. Huamanga regresa a su calma habitual.


(Textos: El Dominical de El Comercio 28-mar-2010, Fotos: Internet).

1 comentario:

fabrizio dijo...

por ti termine mi tarea loco XD